Qué es un japa mala y de qué formas ayuda a meditar

El japa mala es una herramienta tradicional utilizada en prácticas espirituales y de meditación, especialmente en las culturas hindú y budista. Este rosario de cuentas no solo tiene un valor espiritual, sino que también facilita la concentración y la meditación. 

En este artículo, vamos a ver en profundidad qué es un japa mala, cómo se utiliza, dónde se coloca y cómo ayuda en la meditación.

Qué es y para qué sirve el japa mala

El japa mala es un rosario de cuentas utilizado principalmente en la práctica del japa, una forma de meditación en la que se repite un mantra. "Japa" significa repetición, y "mala" significa rosario o guirnalda en sánscrito. 

Tradicionalmente, un japa mala consta de 108 cuentas, aunque pueden encontrarse malas con diferentes números de cuentas, como 27 o 54, dependiendo del tipo de práctica.

Propósito del japa mala

El principal propósito del japa mala es ayudar en la meditación y la repetición de mantras. Al pasar cada cuenta entre los dedos, se mantiene el enfoque y se cuenta el número de repeticiones del mantra, evitando distracciones y ayudando a profundizar en la meditación. 

Además, cada cuenta puede representar una oración o intención específica, lo que añade un nivel de devoción y significado personal a la práctica.

Componentes del japa mala

Un japa mala típico está compuesto por varios elementos:

• 108 cuentas: Simbolizan la totalidad del universo en la tradición hindú. Este número también es considerado alentador y sagrado.
• Cuenta Guru: Una cuenta más grande que marca el inicio y el final del mala. No se cuenta en la repetición del mantra.
• Tassel (borla): La borla finaliza el mala y simboliza la conexión espiritual y la unidad.

Cómo se activa el japa mala

Activar un japa mala, también conocido como consagrar o bendecir el mala, es un paso fundamental antes de comenzar a utilizarlo para la meditación. Este proceso impregna el mala con energía positiva y lo prepara para su uso espiritual.

Pasos para activar el japa mala

• Limpieza: Antes de activar el mala, es recomendable limpiarlo para eliminar cualquier energía negativa. Esto puede hacerse colocándolo bajo la luz de la luna llena, sumergiéndolo en agua con sal marina o utilizando humo de salvia o palo santo.
• Intención: Sostén el japa mala en tus manos y cierra los ojos. Concéntrate en tu respiración y en el propósito por el cual usarás el mala. Establece una intención clara y positiva.
• Repetición del mantra: Sostén cada cuenta entre el pulgar y el dedo medio de la mano derecha. Repite tu mantra elegido mientras pasas cada cuenta, comenzando desde la cuenta Guru y moviéndote en sentido horario.
• Consagración: Una vez que hayas completado el ciclo, sostén el mala frente a tu corazón o tu tercer ojo (el punto entre las cejas) y visualiza una luz blanca o dorada envolviéndolo. Esta visualización llena el mala con energía positiva y lo consagra para su uso.

Dónde se pone el japa mala

El japa mala puede llevarse y colocarse de varias formas, dependiendo del contexto y la intención. Entender cómo y dónde llevar tu japa mala puede aumentar su efectividad y asegurar que se respeta su significado espiritual. Hay varias opciones:

• En la muñeca: Una forma común de llevar el japa mala es en la muñeca, especialmente si es un mala de 27 o 54 cuentas. Esto facilita el acceso y permite usarlo discretamente para la meditación a lo largo del día.
• Alrededor del cuello: Llevar el mala alrededor del cuello es otra opción popular. Esto no solo permite tenerlo cerca del corazón, sino que también sirve como recordatorio constante de tu práctica espiritual y tus intenciones.
• En el altar: Cuando no esté en uso, puedes colocar el japa mala en un altar o espacio sagrado en tu hogar. Esto lo mantiene cargado con energía positiva y lo protege de energías negativas.

Es importante recordar que el japa mala es un objeto sagrado. Evita colocarlo en el suelo o en lugares sucios. Trata tu mala con respeto, reconociendo su importancia en tu práctica espiritual. Los malas tibetanos, por ejemplo, a menudo se llevan alrededor del cuello o en la muñeca, similar a las prácticas con japa malas tradicionales.

Cómo se medita con un japa mala

Meditar con un japa mala es una técnica muy eficaz que puede profundizar tu práctica y ayudarte a mantener la concentración. La metodología implica el uso de un mantra y el movimiento de las cuentas para llevar un conteo preciso de las repeticiones. A continuación, detallamos los pasos para meditar con un japa mala.

Encuentra un lugar tranquilo

Busca un espacio sereno donde puedas meditar sin interrupciones. Es fundamental que este lugar te transmita paz y esté libre de distracciones. Puedes optar por un rincón especial en tu hogar, un jardín tranquilo o cualquier lugar que te inspire calma.

Elige tu postura

Siéntate de manera cómoda, asegurándote de que tu columna vertebral esté recta. Tienes la opción de sentarte en el suelo con las piernas cruzadas (postura de loto o medio loto) o en una silla con los pies apoyados en el suelo. La posición debe ser cómoda para que puedas mantenerla durante toda la meditación sin distracciones físicas.

Respira profundamente

Antes de comenzar, realiza unas cuantas respiraciones profundas para centrarte. Inhala lenta y profundamente por la nariz, llenando completamente tus pulmones, y exhala suavemente por la boca. Este primer paso ayuda a relajar el cuerpo y a preparar la mente para la meditación.

Elige tu mantra

Selecciona un mantra que resuene contigo y con tu propósito de meditación. Puede ser un mantra tradicional como "Om Mani Padme Hum", "Om" o una afirmación personal como "Soy paz" o "Estoy centrado". Es importante que el mantra elegido tenga un significado especial para ti.

Sostén el japa mala correctamente

Toma el japa mala con tu mano derecha. Coloca la cuenta Guru (la cuenta más grande) entre el pulgar y el dedo medio. La cuenta Guru no se cuenta, ya que marca el inicio y el final del ciclo de repetición.

Repite el mantra

Comienza a recitar tu mantra mientras pasas cada cuenta del japa mala entre el pulgar y el dedo medio. Con cada repetición del mantra, mueve una cuenta hacia adelante. Concéntrate en el sonido y la vibración del mantra, permitiendo que tu mente se enfoque completamente en la repetición. Mantén un ritmo constante y relajado.

Mantén la concentración

Si tu mente divaga, suavemente vuelve tu atención al mantra y al movimiento de las cuentas. Es normal que la mente se distraiga, especialmente al principio, pero con la práctica constante, será más fácil mantener el enfoque.

Completa el ciclo

Continúa repitiendo el mantra y moviendo las cuentas hasta que regreses a la cuenta Guru. Este ciclo completo suele consistir en 108 repeticiones, aunque algunos japa malas tienen menos cuentas y requerirán múltiples vueltas para alcanzar el número deseado de repeticiones.

Reflexiona y cierra la meditación

Una vez que hayas completado el ciclo, toma unos momentos para sentarte en silencio. No muevas inmediatamente el cuerpo. Permanece inmóvil y reflexiona sobre tu práctica, sintiendo los efectos del mantra y la meditación. Agradece el tiempo y el espacio dedicados a esta práctica.

Cuidado del japa mala

Después de la meditación, guarda tu japa mala en un lugar especial. Puedes colocarlo en un altar, una bolsita de tela o un espacio que consideres sagrado. Evita ponerlo en el suelo o en lugares que puedan alterar su significado espiritual.

Consejos adicionales para meditar con un japa mala

• Consistencia en la práctica: La meditación con un japa mala se vuelve más efectiva con la práctica regular. Intenta reservar un momento concreto del día para esta práctica, creando así una rutina que fortalezca tu disciplina meditativa.
• Entorno favorable: Puedes mejorar tu experiencia meditativa creando un ambiente adecuado. Utiliza velas, incienso o música suave para crear una atmósfera que te ayude a entrar en un estado meditativo.
• Intención clara: Antes de comenzar, establece una intención clara para tu meditación. Esto puede ser un deseo de paz, amor, sanación o cualquier otra aspiración espiritual. La intención añade una capa de propósito a tu práctica, aportándole un mayor significado.
• Paciencia y compasión: Es posible que al principio te resulte difícil mantener la concentración o completar un ciclo completo de 108 repeticiones. Sé paciente contigo mismo y practica la autocompasión. Con el tiempo y la práctica, tu capacidad de concentración y tu conexión con el mantra se fortalecerán.

En resumen, el japa mala es una herramienta poderosa en la práctica de la meditación. Su uso no solo facilita la repetición de mantras, sino que también ayuda a enfocar la mente, calmar el espíritu y profundizar la conexión espiritual. Desde su activación hasta su uso en la meditación diaria, cada paso con el japa mala añade un nivel de intención y significado a la práctica.

Llevar el japa mala en la muñeca o alrededor del cuello permite tenerlo siempre a mano, recordando constantemente nuestras intenciones y objetivos espirituales. Meditar con el japa mala, pasando cada cuenta mientras se repite un mantra, ofrece una forma estructurada y efectiva de meditar, aumentando el enfoque y la calma interior.